Las obras de arte urbano son un referente de la contracultura en Exarchia, el lugar donde nacen las principales manifestaciones sociales dentro de la ciudad de Atenas y, en general, de toda Europa…
A escasos kilómetros de la Acrópolis en la milenaria Atenas, el arte urbano resalta en los muros de un barrio anarquista.
Visitar Atenas se convierte en un viaje en el tiempo. Es una revisión de una de las culturas antiguas con mayor legado. La capital griega es parte de un territorio considerado como la cuna de la filosofía, de las artes y también de los deportes. Sin embargo, la ciudad es más que esos referentes históricos.
En Atenas se percibe la convivencia entre la importante carga histórica y la sociedad moderna que sobrevive a la crisis. Por otro lado, está la presencia de los migrantes asiáticos y africanos que quieren llegar a la Europa Central. Ellos están en espera de un movimiento correcto para poder acceder a las ciudades europeas de las oportunidades.
Al caminar, las grandes boutiques de ropa y joyas exclusivas se abarrotan de turistas que quieren llevar un souvenir. En Monastiraki, justo bajo la Acrópolis, hay un recurrente flujo de personas. Unos tienen como meta el Partenón y el Ágora, mientras que otros regresan exhaustos de aquellos lugares. Lo que algunos ignoran es que hay otra manera de conocer la ciudad y eso es a través del arte urbano.
La zona del arte urbano en Atenas
Como en cada lugar, el street art también se adoptó como una manera de hablar de lo que sucede en el país. De esa manera se comparten los aspectos positivos y los que no lo son tanto de la sociedad contemporánea. Por ejemplo, sobre la crisis económica o la humanitaria que ha provocado la migración masiva.
Existen algunos barrios en los que predomina la práctica: Psyrri, Metaxourgeio, Anafiotika, Gazi y Exarchia. Todos son céntricos con algunas zonas coloridas y muy distintos entre sí. Sin embargo, éste último es el lugar en el que nacen los movimientos de la contracultura.
Exarchia se ubica a un costado del triángulo histórico ateniense, conformado por el Parlamento de Syntagma, Monastiraki y la Plaza de Omonoia. Es un barrio con una vibra diferente a las demás: se percibe mucha energía y movimiento. Quizás es porque ahí se discuten algunos de los problemas políticos actuales de Grecia.
De hecho, lo primero que se escucha es que la policía no puede entrar y que ahí gobiernan los anarquistas. También que los graffitis son parte importante de sus calles y que tienen muchas historias por contar. Lo primero no es del todo cierto, la policía sí entra, pero también hay mucho respeto a los que habitan Exarchia. Ésto probablemente se debe a los rumores que la envuelven.
Además, es uno de los lugares en los que hay más vida dentro de Atenas. Bares, foros culturales, restaurantes y terrazas son parte de la oferta para visitantes y locales.
Por otro lado, es el epicentro de la verdadera convivencia con griegos y migrantes; es una zona de resistencia urbana. Cada noche se reúnen en la plaza del barrio para beber cerveza, fumar hierba y hablar un poco. En Exarchia hay libertad y también muchas historias en sus muros.
“El graffiti es una forma de expresión libre. en realidad, el arte urbano florece en lugares donde la gente acepta este tipo de expresión…” -W.D.
El street art en Exarchia es una herramienta de expresión en la que se comparten los problemas actuales. De esa manera se busca la independencia, la libertad de expresión y, sobre todo, crear conciencia. Dar a conocer a la gente lo que sucede de manera directa o simbólica y fomentar la cultura de resistencia.
Es por ello que las pinturas de personas son las que predominan en el barrio. Individuos libres, otros sufriendo o presos en una sociedad que los contiene y rechaza. El arte callejero es el medio con el que tanto foráneos como locales se legitiman en Grecia. Es como decir que están presentes, resistiendo y pretendiendo lograr hacerse de una voz. Por ese motivo existen obras que son de artistas conocidos o de los mismos migrantes y habitantes de la zona.
Por ejemplo, Wild Drawing, conocido como ‘WD’ es uno de los más reconocidos. Él es un artista urbano de Indonesia que ha llevado su obra a lugares inusuales de Atenas. Desde muros a punto de caer hasta edificios vivienda y construcciones abandonadas o bajo los puentes. Los graffitis de WD son mensajes de solidaridad y resistencia. Sin embargo, también tiene obras cargadas de fantasía y símbolos de libre interpretación.
Sin duda, ésta es una de las mejores maneras de recorrer las calles de Atenas: tomar un fredo cappuccino mientras descubres la otra cara de la ciudad. El graffiti no es nuevo en Grecia, sin embargo sí es reciente la manera en la que se usa para alzar la voz. Las calles de la capital griega son un lienzo diverso que explica la historia reciente de ese rincón de Europa.