Triangulo Pink Floyd y Dalí

Dalí y Pink Floyd unidos fortuitamente en “Destino”

El cortometraje “Destino” de Dalí y su sincronía con Pink Floyd


Muchas veces se ha hablado de la coincidencia que la música de Pink Floyd crea con producciones visuales independientes, en este caso con Dalí. Quien creará
 un cortometraje llamado “Destino” en colaboración con Disney.
Fragmento del cortometraje Destino de Dalí con Disney

Cortesía: DisneyEsta filmografía es de corte animado y data de 1945 y 1946 pero fue interrumpido por cuestiones financieras. Salvador Dalí realizó este cortometraje con la ayuda de John Hench, un empleado en ese entonces de Disney. Con quien produjo una de las obras animadas más impresionantes que el artista pudo haber creado.

Pero no fue hasta 1999, cuando el sobrino de Walt Disney, Roy E. Disney descubrió las cintas. Proponiendo terminarla por el impacto visual y cultural que podría implicar. Y así fue como en 2003 el cortometraje fue lanzado en diferentes festivales de cine bajo el nombre de “Destino”.

Fragmento del cortometraje Destino de Dalí con Disney
Cortesía: Disney

Tal vez algún fan de la banda alguna vez se encontró con el clip de Dalí y Disney por internet. A lo que su respuesta por el impacto visual del artista, fue agregarle Time del álbum “The dark side of the moon”.

Esta curiosa sincronización se ha dado más de una vez anteriormente. Entre estas coincidencias se encuentran la película clásica del Mago de Oz de 1929 y otra más reciente. Que sincroniza los primeros ocho minutos de “Star Wars: The Force Awakens” con los primeros del mismo disco de Pink Floyd.

Potada del disco The Dark side of the moon de Pink Floyd
Cortesía: Pink Floyd

El misticismo que engloba el disco puede ser tan solo algo que sea casualidad con tantas uniones no pensadas. O tal vez la fórmula musical es muy precisa que podría encontrarse semejanza visual con muchas otras creaciones visuales.

Pero sin duda el resultado final de Dalí, Pink Floyd y Disney es algo que no dejará dormir a muchos. No por el misterio, sino por la exactitud con la que se mezcla un video de 1945 y una canción de 1973.