Diana Al-Hadid, esculturas experimentales en diferentes espacios

Muestra el espiritualismo y  la ficción en sus obras

Diana Al-Hadid es una escultora experimental que muestra crea figuras que parecieran disueltas en el vacío, actualmente está exhibiendo su más reciente colección de trabajos, titulada “Delirious Matter” en el Tarble Arts Center en Estados Unidos.

El nombre de su exhibición se debe a la forma en la que la escultora juega con la ilusión, además de una relación con la novela Gradica de Wilhelm Jensen, obra en la cual inspiro la serie.

Sus figuras están hechas a base de yeso y fibra de vidrio, representando desde figuras femeninas, hasta puentes o estructuras que parezcan cortinas, por donde se pueda pasar debajo de ellas y se aprecien con mayor detalle.

Estas figuras exploran la forma, curiosidad y el proceso de creación mediante el desafío de la gravedad con la pintura y la escultura, contradiciendo así mismo el espacio su motivo, material y masa de origen.

La colección de Diana pertenece a Fuera/Dentro, una serie de proyectos que el Tarable Arts Center está realizando de forma bianual, donde busca entender la transición de espacios desde el exterior y el interior como percepción para los asistentes al museo.

Entre sus obras para esta exposición se encuentran “Smoke and mirrors” “Smoke Screen” y “Sinking and scaffolding”, que combinan la imagen y volumen unidos mediante un esqueleto de acero, con los terminados similares al escurrir gotas de agua en una superficie desde las alturas.

Aunque también ha demostrado que sus obras se pueden mimetizar con el aire libre y la naturaleza, tal y como lo muestra en su primer proyecto de arte público que presenta alrededor del Madison Square Park.

Donde muestra un lado diferente lleno de fantasía, ciencia ficción y aspectos espirituales que impregnan las obras de sentidos diferentes a interpretar por cada asistente al parque.

La unión que realizan las esculturas provoca que se pueda juzgar como una obra de arte o como parte del ambiente que se visita, dándole una esencia diferente, llevándonos de la mano a una cueva y sus estalactitas.