Johnson Tsang logra poner un toque de surrealismo a sus obras
Johnson Tsang es un escultor con una cualidad única: esculpir piezas fantásticas que deforman la realidad.
El estilo de este artista se caracteriza por crear rostros modificados. Éstos poseen rostros en distintos estados de ánimo. Desde el enojo, la alegría, el llanto y la dubitación. O inclusive pueden aparecer deformados; esto es, siendo exprimidos y aplastados.
Las esculturas de Johnson Tsang nunca pasarán desapercibidas. Hay piezas en específico un tanto inquietantes. Esto debido a que, por ejemplo, en una de ellas pareciera que alguien intenta salir de aquel cráneo elástico. Irónicamente la pieza tiene un rictus sonriente.
En el mismo sentido, otra pieza sostiene entre manos uno de esos rostros. Tal pareciera que la cabeza está sufriendo una opresión tal, que el mismo rigor de la fuerza aplicada comienza a deformar por completo el rostro. En otras, las manos abren las cabezas como si fuesen bolsas de plástico.
Las piezas son parte de una serie titulada “Open Mind”, la cual añadió diseños nuevos. En algunas podremos ver efectos de agua derramada; u hojas en crecimiento, algunas más cercenadas por la mitad. Estas características tienen como objetivo dar amplitud a las esculturas.
Por otro lado, resulta curioso saber que, desde su infancia, el artista de 58 años careció de un nivel de educación adecuado. Sin embargo, él siempre se consideró una persona creativa. Su curiosidad por aprender lo llevó a tomar una clase de modelado en 1991.
“El barro parecía tan amable para mí, escuchó cada palabra en mi mente e hizo exactamente lo que esperaba. Cada toque fue tan relajante. Siento que estaba tocando la piel humana. Encontré paz y alegría en ello. Me enamoré de él desde entonces”, comenta Tsang.
Finalmente, podrás conocer más de sus obras a través de su Instagram y Facebook.