Grow, la importancia de la agricultura por Soosegaarde Studio

Roosegaarde Studio ilumina cultivos con instalaciones de luz

Grow es un proyecto de Roosegaarde Studio que, a través de instalaciones de luz, da la importancia que merecen los campos de cultivo

Roosegaarde Studio ha presentado su proyecto Grow, el cual destaca la importancia de la agricultura, a través de la tecnología. Esto mediante una instalación de luces que iluminan de colores 20.000 metros cuadrados ce cultivo de cebolla larga.

Grow, la importancia de la agricultura por Soosegaarde Studio
Créditos: Ruben Hamelink and Daan Roosegaarde

Seguramente más de una vez las personas han pasado al lado de campos agrícolas o sembradíos de cualquier alimento. Sin embargo, estos pasan desapercibidos por ser simplemente un terreno que visualmente no llama la atención de forma extravagante.

Bajo esta primicia, el estudio de Daan Roosegaarde ha trabajado durante dos años en Grow, un proyecto que pretende iluminar un campo agrícola para visibilizarlo y darle el reconocimiento que merece. Principalmente por ser parte esencial de la alimentación de cientos de personas.

Grow, la importancia de la agricultura por Soosegaarde Studio
Créditos: Ruben Hamelink and Daan Roosegaarde

Este proyecto forma parte de Deamscapes, una serie de trabajos del estudio que muestra paisajes de ensueño. Y en esta ocasión toca destacar al sector primario con uno de los paisajes más comunes pero muy importantes.

Grow ilumina un campo agrícola de 20.000 m2 con cuatro sistemas de luces rectas con baterías solares. Estos sistemas son colocados de forma horizontal en un área controlada y solo se puede ver desde lugares cercanos.

Grow, la importancia de la agricultura por Soosegaarde Studio
Créditos: Ruben Hamelink and Daan Roosegaarde

El campo se ilumina solamente con luces azules y rojas que crean una alfombra iluminada de ensueño. De forma que destaca no solo la iluminación sino su mimetización con los sembradíos actuales.

Grow, la importancia de la agricultura por Soosegaarde Studio
Créditos: Ruben Hamelink and Daan Roosegaarde

Lo más importante es que toda la instalación no afecta la tierra ni el crecimiento de, en este caso, las cebollitas. Por lo que es un atractivo muy eco-friendly que cumple su cometido al 100%.