Chad Kouri y el minimalismo de su arte por Edu NoSE

Chad Kouri y el minimalismo de su arte

Las formas minimalistas de Chad Kouri

 

Chad Kouri llega como todos los días en bicicleta a su estudio del West Loop de Chicago. Hace frío. El otoño ya está aquí, los árboles están pelados y ya han caído las primeras nevadas en la ciudad. Kouri tiene el frío controlado. Él es de Clarkston, Michigan, a una hora al norte de Detroit y allí también son amigos de las bajas temperaturas.

Pinturas en espacio de Chad con colores
Cortesía: Chad Kouri

En su estudio suena jazz, un compañero ha llegado antes que él y se ha hecho con la banda sonora. Chad no la discute. Kouri se mudó a Chicago en 2003 para estudiar Comunicación Visual en el Columbia College. Nunca acabó sus estudios, era demasiado caro y no entraba en sus planes. Lo dejó un poco antes y con sus conocimientos se puso a trabajar para una agencia de comunicación. Aquello le daba para vivir, pero también consumía la vida que le quedaba. “Estar delante de una pantalla de ordenador durante toda la semana no era mi objetivo” cuenta Kouri.

Pinturas en espacio de Chad con colores
Cortesía: Chad Kouri

Así que para no morir delante de la pantalla y más aún delante de un trabajo que no le llenaba, comenzó a hacer más trabajos analógicos y a mostrarlos en diferentes rincones de Chicago: cafeterías, pequeñas galerías etc… “Comencé a hacer collages con las texturas de anuncios antiguos que iba encontrándome y así poco a poco comencé también a hacer más trabajo editorial. Lo uno fue llamando a lo otro y así he pasado los últimos 10 años” resume el de Michigan.

Pinturas en espacio de Chad con colores
Cortesía: Chad Kouri

Su trabajo actual está influenciado por su dislexia y las labores de tutelaje que tuvo cuando niño, y que le ayudaron a sintetizar palabras y letras en formas simples. Ahora, lo que parecía una desventaja, lo utiliza en su beneficio influenciando el resto de su vida y su trabajo, ya sean collages, pinturas o cualquier forma de expresión artística “La abstracción de mi trabajo otorga al espectador la libertad de interpretación, la posibilidad de resolver el puzle por sí mismo. No quiero ofrecer las respuestas sino que cada quién las averigüe y utilice su imaginación” explica el artista.

Pintura de Chad en lineas
Cortesía: Chad Kouri

Kouri dice ponerse una serie de reglas al componer sus trabajos. Despliega los materiales sobre la gran mesa de su estudio. Tiene carpetas ordenadas perfectamente por año con papeles y materiales con los que compone sus piezas. Saca su bisturí, sus tijeras, la cola blanca o las pinturas, y se pone a jugar. Si el resultado no es el que tenía en su cabeza, no se culpa. En esa ocasión las reglas establecidas no se habrán cumplido. No pasa nada, se vuelve a empezar.

Pinturas en espacio de Chad con colores
Cortesía: Chad Kouri

Durante los últimos 10 años de práctica artística Chad ha mantenido una mentalidad de Robin Hood. En época de vacas flacas ha trabajado para corporaciones o marcas para ganar algo de dinero y reinvertirlo en su práctica artística y la comunidad que le rodea. Afortunadamente para él, en los últimos 4 o 5 años no ha tenido que volver al mundo empresarial y ha podido mantenerse con encargos y comisiones cuyos ideales van en tónica con los suyos. Pero en otros momentos, ha hecho más labores que las de su trabajo artístico. Ha limpiado suelos, trabajado en bares y hasta empeñó su saxofón para pagar el alquiler “Afortunadamente tengo amigos muy buenos y hace unos años me regalaron otro por mi cumple” añade con una sonrisa.

Pintura de Chad en grises
Cortesía: Chad Kouri

Kouri sabe que vivir del arte no es fácil pero su trabajo le hace feliz y le ha enseñado a llevar el minimalismo más allá del lienzo y los papeles. La vida puede ser simple, nosotros la complicamos por el camino. Como en los collages de Kouri, el equilibrio es fundamental.