La moda de Default Club le quita la seriedad al arte con diseños de prendas que juegan con obras antiguas
El arte y la moda urbana son el sello de Default Club, una marca que tuvo sus inicios en el año 2017. Sin embargo, fue hasta agosto de 2018 cuando comenzó el boom con el lanzamiento de más prendas. Además, claro, de posicionar el diseño rebelde característico de la marca.
Default Club juegan con el arte y le “quitan seriedad”, básicamente así definen el estilo de las prendas. Además, en el movimiento creativo de la marca también se reconoce la influencia de la cultura de internet. Es decir, la cultura popular, con lo que convivimos día a día los seres digitales que convivimos con ello a diario. Por ello, es habitual ver plasmadas en las prendas algunas frases cotidianas o que aluden a experiencias que conocemos.
La colección actual incluye camisetas, hoodies, sudaderas y gorras e incluso cases para teléfonos móviles. Los colores de cada modelo de prensa son negro y blanco, el estampado es el mismo por modelo. Por ejemplo, una de mis favoritas es una camiseta que tiene el print de “La incredulidad de Santo Tomás”, una pintura de Caravaggio. A ésta le acompaña una frase que versa “gangsters don’t cry” y encanta el contraste con la seriedad de la obra del siglo XVII. O una de la Pasión de Cristo que dice “After Party”, aludiendo a cuando terminamos muy mal después de la fiesta.
Además de la influencia del arte en la moda de la marca, reconocen que han tomado inspiración de otros recursos. La música es uno de esos medios en los que han encontrado un estímulo para plasmar en sus diseños. El rapero estadounidense Fredo Santana o la cultura rave son algunos de ellos.
El “sacrilegio” de mezclar el arte con la cultura popular
El equipo de Default Club está ubicado en diversas partes del mundo. Ellos mismos nos explicaron que la parte creativa está localizada en España y Reino Unido. Mientras que la parte que se dedica a la producción de las prendas está en Lituania.
Por cierto, el trabajo de Default Club ha incomodado a algunas personas por la irreverencia de sus estampados. Algunos, de hecho, se han referido a eso como “sacrilegio” porque creen que no deberían intervenir así las obras de arte. A pesar de ello, Default acepta las críticas y reconoce que “con las redes sociales todo el mundo tiene voz”. Así que cualquier persona puede emitir su opinión al respecto y ellos están bien con eso. Es parte del proceso.
Las prendas pueden chequearlas y adquirirlas en la página web de la marca. Échenle un vistazo, seguro que se llevan una.