Paolo del toro y la dualidad de sus esculturas

Las obras de Paolo del Toro buscan que las personas piensen sobre sus dobles personalidades

Paolo del Toro es un artista originario de Reino Unido. Sus obras a base de espuma y lana tratada, muestran el lado terrorífico y amable de las cosas, con personajes que pueden parecer demonios y no serlo.

Actualmente radica en Estados Unidos, donde comenzó su carrera como escultor, iniciando con la madera. Siendo esta una actividad que llegó de forma fortuita tras grabar una sirena debajo de un árbol, por ocio.

Encontrando en la transformación de un elemento, como lo puede ser una rama, en algo mágico. Trayendo por consiguiente un paso desde crear cosas a base de madera, como cajas, hasta las figuras que hace hoy en día.

Mismas esculturas que cobran vida por su peculiaridad de ser realizadas como máscaras. Llevándolas de un lado a otro entre la naturaleza acompañadas de un cuerpo que las modela.

Estas caras representan formas un poco desagradables, similares a demonios o seres extraños. Mismos que son acompañados por la dualidad que se genera por rasgos humanos.

Esta dupla de máscaras se realizó con un objetivo en específico. El de encontrar lo siniestro y lo que no lo es, lo familiar y desconocido, así como lo elegante y lo grotesco. Esperando que el espectador lo relacione y se ponga a meditar sobre el que probablemente también tiene esta doble cara. Dentro del buen sentido, siendo posible el tener dos personalidades, el bueno y el malo.

Visualmente, él cuenta que sus influencias son los sistemas psicológicos y el arte mitológico. Pasando por cuentos de hadas, el folclore y hasta el arte tribal.

Siendo de esta forma que sus personajes se encuentran en desacuerdo con su propia identidad. O al menos eso cuenta, dándoles una personalidad propia, tal y como una persona normal podría tenerla.