Cortesía: @the1975/Instagram
Un beso durante un concierto de The 1975 en Malasia desató una serie de eventos que culminaron en una multa millonaria para la banda y la cancelación de un festival. Te contamos todos los detalles.
En el mundo del espectáculo, un gesto puede cambiarlo todo. Y si no, que se lo pregunten a la banda británica The 1975, que tras un acto de rebeldía en pleno escenario, se vio envuelta en una controversia que sacudió a Malasia y al mundo del entretenimiento.
Durante su presentación en el festival Good Vibes en Kuala Lumpur, el pasado 21 de julio, Matty Healy, líder de The 1975, decidió criticar las leyes anti LGBTIQ+ de Malasia. Pero no se quedó ahí. En un acto de desafío, besó a Ross MacDonald, el bajista del grupo. Tras el beso, Healy no dudó en expresar su descontento con las restricciones, calificándolas de “ridículas”.
El beso no solo interrumpió el concierto, sino que también llevó al Ministerio de Comunicaciones y Digital de Malasia a cancelar los dos días restantes del festival. Las autoridades locales no solo suspendieron el evento, sino que también prohibieron a la banda volver a presentarse en el país.
Future Sound Asia, la productora del evento, no tardó en reaccionar. David Matthew, su abogado, confirmó que la banda había “incumplido el contrato”. Según él, se había asegurado por escrito que la presentación de The 1975 se apegaría a todas las regulaciones locales. Sin embargo, esa garantía fue claramente ignorada.
La cifra que The 1975 debe pagar asciende a nada menos que $2.6 millones de dólares. Y si bien esta suma ya es sorprendente, no es el único problema legal que enfrenta la banda. Se rumorea que comerciantes y artistas que participaron en el festival están preparando una demanda colectiva contra ellos.
A pesar de que el gesto de Healy podría interpretarse como un acto de apoyo a la comunidad LGBTQ+, la realidad es que muchos en Malasia no lo vieron con buenos ojos. De hecho, algunos miembros de la comunidad LGBTQ+ local condenaron a Healy, sugiriendo que sus acciones podrían empeorar la situación de los derechos LGBTQ+ en el país.
Hasta el momento, la banda no ha emitido un comunicado oficial sobre el incidente. Sin embargo, el mundo espera ansioso su respuesta.
El mundo del espectáculo está lleno de momentos inesperados. Pero lo que ocurrió en Malasia con The 1975 nos recuerda que un acto, por pequeño que sea, puede tener grandes repercusiones respaldadas por el contexto local. Y mientras esperamos la respuesta de la banda, nos queda reflexionar sobre la libertad de expresión y los derechos LGBTQ+ alrededor del mundo.
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La banda debe pagar $2.6 millones de dólares.
Expresó que era “ridículo” imponer restricciones sobre lo que la gente puede o no hacer.
Además de la multa, se rumorea que enfrentarán una demanda colectiva por parte de comerciantes y artistas del festival.
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