Non Fungible Tokens, o NFT, y las posibilidades del Crypto Arte

Los Non Fungible Tokens, o NFT, es la tecnología por la que mucha gente está pagando millones

Cuando creíamos que la inteligencia artificial era la última revolución tecnológica llegan los Non Fungible Tokens (NFT) para desmentir esta vieja creencia. Y es que el arte, las ilustraciones y prácticamente cualquier cosa, puede alcanzar precios insólitos gracias a los NFT.

¿Qué son los NFT?

Comencemos por entender qué son los NFT. Se trata de elemento digitales, relativamente nuevos, diseñados para la representación de cualquier cosa que puedas imaginar. Es decir, son pequeños activos físicos tokenizados, recursos digitales raros, acciones o prácticamente cualquier otra cosa. Dichos activos tienen la capacidad de representar las formas y propiedades del objeto en cuestión.

Otra de sus propiedades es su carácter de elementos irrepetibles, no hay dos iguales y, por lo tanto, los NFT no pueden ser sustituidos por otro token idéntico. Para ser más precisos esta condición se le conoce como fungibilidad la cual es posible gracias a contratos inteligentes que impiden la duplicación.

Por otro lado, los NFT pueden presentarse de diferentes formas, dependiendo del estándar en el que se basen, por ejemplo, ERC721 y ERC1155 para las NFT de Ethereum, y TRC721 para las de TRON. Cada uno de estos estándares tiene sus propias ventajas y limitaciones, que pueden afectar a los tipos de NFT que pueden crearse.

Asimismo, los Non Fungible Tokens se almacenan como datos en una cadena de bloques y se guardan en monederos compatibles con los NFT. Cada NFT tiene su propio conjunto de atributos (por ejemplo, metadatos onchain y offchain) que lo hacen único. De ahí su condición de unicidad.

¿En qué reside la plusvalía de los NFT?

Algunos NFT son muy valiosos. La artista Grimes vendió recientemente un montón de arte en NFT por casi 6 millones de dólares. Una NFT de LeBron James haciendo una jugada histórica para los Lakers ganó más de 200,000 dólares. La banda Kings of Leon lanzará su nuevo álbum en forma de NFT.

En concreto, los NFT son únicas y pueden variar en su rareza, deseabilidad y utilidad por lo que el mercado de los NFT ha quedado oficialmente inaugurado. Con ello también se sumaron los coleccionistas y compradores que buscan invertir en esta tecnología. La premisa, entonces, resulta fácil: los NFT valen tanto como alguien esté dispuesto a pagar por ellas.

¿Cómo funcionarían los NFT en el mundo del arte?

Como todos los datos de las NFT se almacenan en la cadena de bloques mediante contratos inteligentes, cada ficha no puede ser destruida, eliminada o replicada.  La propiedad de estos tokens también es inmutable, lo que significa que los jugadores y coleccionistas poseen realmente sus NFT, como cuando se compra una obra de arte.

Los NFT están demostrando ser un catalizador en la transformación de la economía de las actividades creativas, lo que permite a los creadores monetizar directamente con sus fans. Crear arte en blockchain como NFT significa que el contenido de un artista se puede vender globalmente en mercados descentralizados. 

Gracias a las NFT los crypto artistas ganan derechos (normalmente el 10%) de todas las ventas futuras, por lo que el artista sigue beneficiándose de todas las ventas secundarias. Además, las obras de arte digitales pueden rastrearse hasta el creador original, lo que permite autentificar las piezas sin necesidad de verificación por parte de terceros.

En resumen, las NFT ayudan a demostrar la autenticidad y la propiedad, impulsando la economía emergente de los objetos de colección digitales y los bienes virtuales. Esta tecnología jugarán un papel importante en la próxima era de la economía digital.